El jefe de la planta de Amoniaco y Urea gana un sueldo de Bs 250 mil, mientras que otros dos técnicos en cargos similares tienen un salario de Bs 100 mil, admitió este domingo el presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen.
La autoridad justificó los salarios elevados porque al tratarse de una planta petroquímica se requiere de personal altamente calificado para la manipulación de productos y realizar operaciones de riesgo, tomando en cuenta que existe movimiento de amoniaco y nitrógeno.
“El salario máximo son 250 mil bolivianos que gana el jefe de la planta, tenemos dos jefes paralelos que ganan a 100 mil bolivianos (…) Son salarios que son elevados, es nuestro primer polo petroquímico y necesitamos traer personal extranjero capacitado, que en otros lugares del mundo van a percibir esos salarios”, explicó en entrevista con medios estatales.
El analista del sector Hugo Del Granado observó el sueldo exorbitante que percibe el jefe de planta, información que fue extraída del reporte YPFBR-DAL/SAL-9-CE/2021 emitido por YPFB Refinación, según la publicación de Los Tiempos.
El ejecutivo petrolero señaló que el personal que trabaja en la planta es del exterior, son contratados con el compromiso de que compartan sus conocimientos y que en el tiempo se cuente con personal calificado del país.
Operaciones
Por otra parte, el ministro de Hidrocarburos, Franklin Molina, explicó que el costo del servicio de operación y mantenimiento de la dicha planta alcanza a $us 44,3 millones por año, 50% menos de lo que cobraba la empresa coreana Samsung.
“El año 2017, cuando inicia operaciones la planta, Samsung por este tipo de servicios por operación y mantenimiento que prestaba a YPFB tenía un costo de 88,8 millones de dólares. Por ese servicio YPFB Refinación cobra 44,3 millones de dólares, prácticamente hemos reducido a la mitad”, detalló.
En ese contexto, Dorgathen manifestó que existe una campaña de desprestigio contra la planta porque, según a su criterio, es la muestra de la política de industrialización del gobierno de Luis arce.
“La planta de Amoniaco es un icono de la industrialización, es muestra de este modelo económico que ha sido tan exitoso de convertir la materia prima y darle un valor agregado. Es un icono del proceso de cambio y es por eso que se le ataca tanto y se busca que no funciona o es ineficiente”, indicó.
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